In colonial Mexico, a wealthy plantation owner forces his slaves to taste some-times poisonous mushrooms, which are used in a family recipe and served at lavish parties.
México, comienzos del siglo XIX. En una de sus cacerías, el rico español Everardo, dueño de la hacienda de los Rivera, ve aparecer de súbito un niño negro desnudo frente a una gran cascada. Everardo bautiza al niño negro Gaspar y lo regala a una de sus hijas, la niña Emma. Con el paso del tiempo se hacen adultos Gaspar, Emma y los hermanos de ella, Lucha y Sebastián. Everardo vuelve muy envejecido de un viaje a Europa con Elvira, su ardiente esposa. Emma y Gaspar son amantes. Sebastián, ansioso de dejar el lugar, logra que su padre lo envíe con Lucha a la capital cuando el joven hiere de un balazo a una pantera, Toy, que Everardo tiene en su casa pese al odio de Elvira por el animal. Al meterse Elvira de noche en el cuarto de Gaspar, que la rechaza, Toy, soltada al parecer por Everardo, mata a la mujer. Vuelven Sebastián y Lucha para asistir al entierro de su madre. Sebastián viaja a Europa, pero Lucha se queda y revela a su padre los amores de Gaspar y Emma. En castigo, Everardo ordena que Gaspar sea encadenado y pruebe en un banquete unos hongos para saber si son venenosos o no, práctica que ha costado ya las vidas de varios peones. Emma finge no querer a Gaspar para facilitar que su amado vomite los hongos. Así, tanto Everardo y Lucha como sus invitados mueren envenenados en pleno banquete. Gaspar y Emma huyen a la cascada, donde el negro desaparece de pronto y la pantera mata a la joven. Desnudo otra vez, Gaspar camina hacia la cascada.
